La marcha de la familia energética, como la denominó la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (Utier), ratificó de este modo su rechazo a la entrega de la corporación pública al consorcio norteamericano LUMA Energy, por considerar que lesiona al pueblo puertorriqueño en todos los sentidos.
Con una pancarta de un extremo a otro de la avenida que conduce al Capitolio, sede de la Asamblea Legislativa en el sector de Puerta de Tierra, las mujeres reclamaron al gobernante puertorriqueño, Pedro R. Pierluisi, que oiga los reclamos del pueblo.
‘Pierluisi escucha al pueblo; detenga el contrato con LUMA’, reclamaron en la pancarta desplegada por las trabajadoras de la AEE al frente de la protesta, junto al presidente de la Utier, Ángel Figueroa Jaramillo.
La corporación estadounidense-canadiense, cuya llegada a Puerto Rico es un misterio, no aportará ni un solo centavo en el proceso de privatización, por lo que corresponderá al pueblo pagar mil 500 millones de dólares en 15 años.
Los integrantes de la Utier advirtieron que no se detendrán hasta que se atiendan sus reclamos contra LUMA Energy.
Figueroa Jaramillo expresó que el gobernador Pierluisi, quien viajó en este día a Washington, debe escuchar los reclamos del pueblo, porque no sólo se aumentará el coste de la factura de luz, sino que se desplaza a los trabajadores.
Los miembros de la Utier y otras organizaciones de empleados de la estatal AEE, al igual que los Jubilados de la AEE, las Asociación de Gerenciales y la Unión de Empleados Profesionales Independientes, además de otros sectores solidarios.
Mientras, el presidente de la Cámara de Representantes, Rafael Hernández Montañez, advirtió que no se aprobaría la entrega de 750 millones de dólares para LUMA Energy, tal como reclama la Junta de Supervisión Fiscal, impuesta por Washington al gobierno isleño.
El consorcio norteamericano tiene proyectado asumir el 1 de junio próximo la transmisión y distribución de la luz eléctrica del país.
Entre los participantes en la marcha estaba el senador Rafael Bernabe, del Movimiento Victoria Ciudadana (MVC), quien destacó que, tal como se comprometió, no abandona la lucha en la calle.
También estuvo el coordinador general del MVC, Manuel Natal Albelo, quien exhortó al gobernador a detener este contrato, que al parecer no fue producto de un análisis riguroso, como el realizado por la Utier, por lo que es nefasto para el país.
‘Entendemos que es un contrato oneroso para todas las personas, en sus hogares y en sus pequeñas y medianas empresas, que va a ver reflejado un aumento en las tarifas de luz y del agua, que si hubieran hecho un análisis riguroso hubieran llegado a la conclusión de que es un contrato nefasto’, dijo el exlegislador.
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