Hasta ahora suman tres las naciones del llamado viejo continente en rechazar el inmunizante pues antes lo hicieron Noruega y Dinamarca.
El ministro de Salud austríaco, Wolfgang Mueckstein, declaró al canal Puls 24 que quien ya recibió la primera dosis será inoculado también por segunda vez.
Declaró que aunque la vacuna ‘es segura’ decidió interrumpir su uso debido a la ‘mala fama entre la población’ y ‘problemas de entrega’.
En marzo último Francia, Italia, Suecia y Alemania interrumpieron o limitaron el uso de la propuesta anglo-sueca tras una serie de informes de que algunas personas vacunadas desarrollaron coágulos sanguíneos.
Más tarde Reino Unido desaconsejó su utilización en menores de 30 años, como medida de precaución tras el reporte de más de una treintena de casos de trombosis y varios fallecidos.
Por esos días la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró que los datos disponibles no sugerían ningún aumento general de las condiciones de coagulación como trombosis venosa profunda o embolia pulmonar después de la administración de la vacuna.
Los beneficios del inmunizante de AstraZeneca superan los riesgos; recomendamos continuar la inmunización con ese producto, indicó la OMS.
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