Gaza resistió 11 días de bombardeos masivos de Israel al costo de la muerte de 243 personas, de ellas 66 niños, 39 mujeres y 17 ancianos, además de mil 910 heridos, parte de los cuales morirán por la falta de equipos médicos y medicinas causada por casi tres lustros del bloqueo decretado por Tel Aviv.
Haniye agradeció a Irán su ‘ayuda permanente a la resistencia de Gaza, la cual se abstuvo de cuantificar en una alocución pública difundida por la cadena noticiosa qatarí Al Yazira cuya sede en la franja fue destruida por misiles israelíes.
Añadió que ‘Gaza se irguió para defender Jerusalén’ en alusión a los disparos desde ese territorio contra zonas en Israel, causantes de 12 muertes, en protesta contra el desalojo de sus casas de la población autóctona palestina del distrito de Sheij Jarrá para entregarlas a pobladores israelíes trasplantados en el plan de judaización de Jerusalén este.
La erupción de violencia comenzó a gestarse con la prohibición por la potencia ocupante a fieles musulmanes de orar en la mezquita de Al Aqsa, uno de los tres lugares más sagrados del Islam, seguida del desalojo de los residentes en Sheij Jarrá y, antes aún, la proscripción de las elecciones legislativas en Jerusalén este.
Los comicios estaban programados para mañana, día 22, pero fueron suspendidos en protesta por la medida de las autoridades ocupantes.
La población de Gaza dijo al mundo que la resistencia nunca se rendirá, aseguró Haniye, que comparte el liderazgo de Hamas con Ismael Haniye, en el exilio en Siria.
Estimó que, en términos regionales’la victoria destruyó el proyecto israelí de ‘coexistencia y normalización’ en las relaciones bilaterales con los países del Golfo (…)la derrota de Israel en la guerra de Gaza tendrá importantes consecuencias para su futuro’.
jcm/msl/gdc