‘Malasia y Filipinas siguen comprometidas a mantener un alto nivel de cooperación frente a las amenazas de los grupos extremistas’, señaló en un comunicado la Policía de Sabá, un estado de la porción malasia de la isla de Borneo donde fueron atrapados los insurgentes.
En el enfrentamiento fueron ultimados cinco miembros del grupo armado, vinculado al Estado Islámico y considerado el más violento del archipiélago filipino.
La entrega del grupo se produjo en aguas internacionales entre Sabá y el sur de Filipinas, una zona donde Abú Sayyaf está particularmente activo.
Desde los años 90 del siglo pasado Abu Sayyaf (Portadores de la Espada) intenta establecer un estado islámico en la isla de Joló.
Además de ese, otros grupos como los Luchadores Islámicos para la Liberación del Bangsamoro, Ansar Khalifa Philippines o Maute están activos en la cercana isla de Basilan, en el llamado Mindanao musulmán.
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