‘Si Leopoldo López tiene injerencia en la política peruana, estoy segura que habrá un pronunciamiento’ de la Cancillería al respecto, dijo Bermúdez en una entrevista radial.
Respondió así una pregunta sobre la ausencia de un comentario del Ministerio de Relaciones Exteriores sobre quejas por la intromisión del personaje en asuntos internos peruanos, al apoyar abiertamente a la candidata Keiko Fujimori y pronunciarse contra las posiciones de su rival, Pedro Castillo.
La alta funcionaria agregó que no ha tratado el tema con el canciller Allan Wagner, quien, según la prensa, autorizó el ingreso al país de López, el sábado último, pese a que las autoridades migratorias lo impedían por no tener documentación en regla.
Recordó además que la Cancillería siempre se ha pronunciado ‘ante la ‘intervención de cualquier persona o partidos extranjeros’ en temas que solo conciernen a los nacionales.
El 22 de abril último, ese organismo expresó preocupación por la supuesta intromisión extranjera en asuntos internos, tras declaraciones de los expresidentes de Bolivia Evo Morales, y de Uruguay José Mujica, de saludo al triunfo de Pedro Castillo.
De otro lado, los analistas políticos Giovanna Peñaflor y Fernando Tuesta criticaron hoy en una conferencia con la prensa extranjera la actitud de esa cartera diplomática al respecto.
Peñaflor consideró que la inequidad del proceso electoral se verifica con la actitud de la Cancillería frente a Morales y Mujica y la omisión del rechazo a la no intervención en el caso de López.
‘Sacar un comunicado y decir que no debe haber intervención extranjera y luego callarse (en el caso de López), es un error difícil de entender’, expresó a su vez Tuesta.
El prófugo venezolano, condenado en su país por terrorismo y otros crímenes, asistió aquí a un foro político derechista y participó ayer en el juramento de respeto a la democracia, formulado por la hija del exgobernante Alberto Fujimori, preso por crímenes de Estado.
López además da entrevistas y lanza discursos con ataques al gobierno de su país y contra otras administraciones progresistas y llama tácitamente a los peruanos a no votar por Castillo y dar su apoyo a Fujimori.
El visitante fue objeto el domingo último de manifestaciones de repudio de manifestantes peruanos por su injerencia en el proceso electoral, así como de venezolanos opositores a su gobierno que lo acusaron de corrupción y engaño.
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