Por iniciativa de la fuerza política opositora, el Senado acordó en abril esa instancia de control ante la grave situación sanitaria del país, después de una temporal resistencia de la bancada oficialista.
La comisión está integrada por dos frenteamplistas, cuatro legisladores del Partido Nacional, dos del Partido Colorado y uno de Cabildo Abierto.
Andrade manifestó en conferencia de prensa la importancia de dar pasos en conjunto y que es el momento de que ‘se logren acuerdos que permitan frenar una tragedia’ por los índices de movilidad y la atención de la salud que está desbordada.
Sostuvo que luego de restringir la movilidad para reducir la curva de contagios el Estado debe dar un mensaje fuerte, ordenar a la sociedad para que durante tres o cuatro semanas haga un esfuerzo para evitar la muerte de cientos de uruguayos.
Hace dos días la intendenta frenteamplista de Montevideo, Carolina Cosse reiteró la propuesta de su formación política de una mesa de trabajo nacional para llegar a acuerdos con participación de todos los actores políticos y de la sociedad ‘cámaras empresariales, sindicatos, universidades, científicos y la academia’.
La convocatoria del primer mandatario tiene lugar después que la evaluación ciudadana de la gestión gubernamental de la pandemia cayó de un saldo positivo de 68 por ciento a solo un 51 por ciento, es decir opiniones favorables y desfavorables ‘casi empatadas’, de acuerdo con una encuesta de la Consultora Factum.
Nicolás Martinelli, uno de los más cercanos asesores del primer mandatario, se convirtió en blanco de críticas de parlamentarios opositores por sus declaraciones en la televisión de que el nivel de fallecidos por Covid-19 ‘ha estado estable’ y ‘hacia adelante yo lo veo como una gripe’.
Uruguay es uno de los primeros países en el mundo con más contagios y fallecimientos diarios por millón de habitantes debido al virus SARS CoV-2, causante de la enfermedad.
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