El pronunciamiento tiene lugar ante la visita de la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris a este país y busca dignificar a las personas migrantes y refugiadas, apunta el texto firmado por el cardenal Álvaro Ramazzini, obispo de la Diócesis de Huehuetenango y Presidente de la Comisión Episcopal de Justicia y Solidaridad. .
Con la certeza de que uno de los puntos a tratar en las agendas de los funcionarios en su encuentro con Harris será el tema migratorio, queremos llamar la atención sobre la carencia de una política migratoria en Guatemala, apunta el manifiesto.
Para la Pastoral, urge abordar esta problemática desde las causas que provocan el éxodo forzado como ‘la corrupción, la impunidad, la exclusión, la injusticia, la inequidad, el abandono y la falta de oportunidades como principales obstáculos que entorpecen el desarrollo’.
En su llamamiento afirman que, como Iglesia católica en coordinación con organizaciones de la sociedad civil y academia afines a la temática, cuentan con ideas y propuestas encaminadas a la construcción de una política migratoria integral y reiteran en ese sentido su disponibilidad para la discusión.
Por el conocimiento, encuentro directo y servicio a las personas en situación y riesgo de movilidad, refugio y trata, reiteramos y confirmamos que las migraciones irregulares son producto de un sistema económico y político fallido, el cual no ha priorizado las causas estructurales de origen, reitera el pronunciamiento también firmado por Domingo Buezo, presidente de la Pastoral de Movilidad Humana.
La víspera, trascendió aquí que Guatemala acogerá el primero de varios centros para migrantes promovido por Estados Unidos, aunque el Gobierno no dio detalles de cómo funcionaría.
Un editorial del periódico Prensa Libre advirtió que ya se comienza a entrever una propuesta para convertir a esta nación en una enorme sala de espera de resolución de solicitudes de asilo, muy similar a lo que en su momento planteó el expresidente Donald Trump con su tercer país seguro.
‘La única diferencia es que esta vez se anuncia con mayor amabilidad y disimulo, con la vista puesta en desfogar el problema de la frontera sur estadounidense, pero no en las consecuencias contraproducentes de tal enfoque’, llamó la atención el diario.
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