Según el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), tal porcentaje de ese periodo aparece por encima de la meta objetiva del 3,75 por ciento, con 1,5 puntos de tolerancia arriba y abajo.
El índice se proyectó frente a mayo de 2020, cuando registró -0,38 por ciento, en medio de la pausa económica durante la primera ola de la pandemia de Covid-19 y acumula un alza de 3,22 por ciento en los cinco primeros meses del año.
De acuerdo con el IBGE, el alza de los precios de mayo, superior al 0,31 por ciento de abril, fue impulsada principalmente por la energía eléctrica (5,37 por ciento) y los combustibles (2,87).
Todos los grupos económicos analizados presentaron incrementos de importes, pero el mayor impacto se debió al sector de la vivienda, cuyos valores subieron un 1,78 por ciento.
El instituto explicó que el aumento del grupo de vivienda se debe principalmente por el impacto de la electricidad y a las nuevas tarifas en la factura de la luz que entraron en vigor desde mayo.
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