En un mensaje al conmemorarse hoy el Día Mundial contra el Trabajo Infantil, el jefe del Estado señaló que este país no escapa del impacto de ese flagelo, incluida la explotación por parte de la delincuencia organizada, situación que, dijo, compromete el futuro de nuestros jóvenes y toda la sociedad.
El mandatario subrayó la necesidad de un compromiso concreto y solidario de los países ‘contra una plaga intolerable que abarca todavía hoy a más de 150 millones de niños, según estimados de la Organización Internacional del Trabajo’, acotó.
En ese sentido, precisó que más de 70 millones de ellos son obligados a desarrollar actividades laborales peligrosas que ponen en peligro su salud, seguridad e integridad.
Al destacar la liberación de más de 100 millones de niños del trabajo infantil en los últimos 20 años, Mattarella alertó sobre un posible incremento de ese fenómeno por el impacto económico y social de la pandemia de Covid-19.
Especialmente, apuntó, en los países más frágiles, donde se ha evidenciado una relación entre el aumento de la pobreza, cierre de las escuelas e impulso al ingreso de los menores en el mercado laboral informal.
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