En una declaración pública, la ACRB-JM recuerda que el 23 de junio se realizará la votación en la Asamblea General de las Naciones Unidas de una resolución contra este cerco con ‘carácter imperialista, extraterritorial y violatorio del derecho internacional’.
Denuncia que la aplicación del asedio constituye ‘el principal obstáculo para el desarrollo económico y social de Cuba, y la más flagrante y masiva violación de los derechos humanos de los pueblos de Nuestra América’. Lamenta que el 7 de noviembre de 2019 el Gobierno de Brasil, siguiendo órdenes de Washington, no condenó la brutal medida unilateral contra la isla.
Durante la votación en la Asamblea General de la ONU, Cuba recibió ese año un respaldo abrumador, cuando 187 Estados miembros se pronunciaron contra el bloqueo.
Solo dos países se abstuvieron: Colombia y Ucrania; mientras que Estados Unidos, Israel y Brasil votaron en contra del levantamiento del cerco y quedaron aislados ante el reclamo de la mayoría de la comunidad internacional.
La asociación también apunta que durante la administración de Donald Trump se profundizó este cerco ‘mediante más de 200 acciones adicionales, haciendo el mayor uso posible del poder financiero, político, diplomático y militar para imponerle al mundo la prohibición de mantener cualquier tipo de relación con Cuba’.
Todo ello, agrega, en medio del combate que ‘nuestra Revolución emprende contra la pandemia de Covid-19 que azota a toda la humanidad’.
Los cubanos residentes alertan asimismo que el sucesor de Trump, el demócrata Joe Biden, ‘es un digno heredero y fiel continuador de las políticas y acciones realizadas contra nuestra patria’.
Pero, remarca la ACRB-JM, ‘Cuba se mantiene firme y luchando. Producimos nuestras propias y efectivas vacunas, así como recibimos una importante ayuda de diferentes grupos solidarios’, subraya finalmente.
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