En una audiencia con los miembros de la representación italiana de la organización católica de socorro Cáritas, con motivo del medio siglo de su fundación, el sumo pontífice señaló que ‘si no somos capaces de mirar a los ojos de los pobres, mirarlos a los ojos, tocarlos con un abrazo, con la mano, no haremos nada’.
Es con sus ojos que debemos mirar la realidad, porque mirando a los ojos de los pobres miramos la realidad en una manera diferente a como entra en nuestra mentalidad, indicó Francisco al referirse a la ‘vía de los desposeídos’.
En ese sentido, precisó que la historia no se mira desde la perspectiva de los vencedores quienes la muestran bella y perfecta, sino desde la de los pobres que es la de Jesús.
Son los pobres quienes ponen el dedo en la llaga de nuestras contradicciones y perturban nuestra conciencia de forma sana, invitándonos a cambiar, apuntó y advirtió que cuando el corazón y la conciencia no se preocupen mirando a los pobres, es necesario detenerse porque ‘algo no está funcionando’.
El pontífice instó también a mantener ‘la vía del Evangelio’ entendida como ‘el estilo del amor humilde, concreto pero no vistoso, que propone no impone, ‘el estilo del amor gratuito que no busca recompensas’, puntualizó.
Por último, Francisco mencionó la ‘vía de la creatividad’ y al respecto pidió a los miembros de Cáritas italiana no dejarse desanimar ante el creciente número de nuevos pobres y nueva pobreza, al tiempo que los invitó a seguir cultivando ‘sueños de fraternidad’ y ser ‘señales de esperanza’.
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