Fuentes vinculadas al caso citadas por varios medios, confirmaron la incorporación de otros 11 sospechosos al expediente en el cual aparecían hasta ahora el gestor del sistema, Luigi Nerini, el director en ejercicio, Enrico Perocchio, y el jefe de servicios, Gabriele Tadini.
Entre los recién involucrados en el caso figuran dirigentes y otros empleados de las empresas Ferrovie del Mottarone, y Letnier, encargadas de la gestión y mantenimiento del teleférico, respectivamente.
La tragedia ocurrió el 23 de mayo último cuando una cabina del sistema de transportación de pasajeros cayó al vacío y rodó cuesta abajo con 15 personas a bordo, tras la ruptura del cable de tracción a punto de concluir el trayecto de ascenso hasta una altura de mil 492 metros. .
La fiscal de la ciudad de Verbania, Olimpia Bossi, señaló entonces en declaraciones a la prensa que el sistema presentaba evidentes anomalías, obviadas conscientemente por quienes las conocían para evitar la suspensión del servicio durante el tiempo necesario para subsanarlas.
En ese sentido, confirmó la manipulación del mecanismo mediante la introducción de un dispositivo que impidió la activación del freno de emergencia al producirse la emergencia.
Bossi señaló que la fiscalía sustentaba sus pesquisas en las hipótesis de homicidio múltiple, lesiones gravísimas –respecto a un niño sobreviviente- desastre culposo y, posiblemente, atentado culposo por violación de normas de seguridad en materia de transportación de pasajeros.
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