Miranda es el autor de la denuncia sobre la existencia de supuesta corrupción en la cartera de Sanidad en el proceso de compra de inmunizantes contra el coronavirus SARS-CoV-2, causante de la Covid-19.
‘(Célia) mintió mucho y fue desenmascarada por todos los senadores. Me alegro que la verdad salga a la luz’, aseveró el parlamentario.
La funcionaria señaló en la CPI, que supervisa la gestión gubernamental ante el virus, que la negociación con el fabricante indio Bharat Biotech no fue atípica.
En casi siete horas de presentación, también negó la existencia de pagos por adelantado y que nunca se benefició del ‘clientelismo político’ para ejercer su cargo.
Tales explicaciones, sin embargo, no convencieron a los senadores, quienes aseguraron que hubo, eso sí, irregularidades en todo el procedimiento de negociación.
La legisladora Simone Tebet calificó la declaración de confusa y señaló que no tenía ninguna duda de la existencia de un contrato ‘fraudulento y con fines ilícitos’.
El asambleísta Rogério Carvalho quiso saber a quién protegía la testigo, ‘dado el diversionismo y la memoria selectiva del deponente’.
Célia llegó a la CPI después que los congresistas escucharan al diputado Miranda y a su hermano, Ricardo Miranda, el 25 de junio.
Los dos señalaron que las facturas generadas para la compra (factura) traían menos dosis de las acordadas, la determinación del pago por adelantado y el nombre de una empresa intermediaria que no estaba en el contrato, Madison Biotech, con sede en Singapur.
Al principio de su testimonio, Célia contradijo a los hermanos Miranda al negar la exigencia del desembolso por adelantado.
De acuerdo con la empleada del ministerio, la liquidación solo se haría tras la entrega del producto y la aprobación de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria, lo cual no ocurrió.
Las solicitudes de convocatoria de la funcionaria fueron presentadas por los senadores Humberto Costa y Alessandro Vieira.
Para Costa, escuchar a Célia era ‘fundamental para aclarar las sospechas de corrupción’ en torno al contrato de Covaxin.
La CPI fue creada para investigar el desempeño del Poder Ejecutivo ante la Covid-19 que hasta la fecha cobró más de 525 mil vidas perdidas y cerca de 19 millones de infectados.
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