De acuerdo con el portavoz de la CE, Daniel Ferrie, la prioridad es el pacto mundial entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y por ello suspendieron momentáneamente analizar el impuesto digital.
Añadió que hay mucho trabajo técnico por hacer, elementos de diseño y un plan detallado de implementación, ante lo cual la CE paralizará los asuntos relacionados con la tasa comunitaria.
La suspensión temporal de discutir el impuesto sobre las multinacionales digitales coincide con la petición de la secretaria estadounidense del Tesoro, Janet Yellen, de reconsiderar el plan comunitario de reformar toda la estructura fiscal para los gigantes digitales.
Ello fue criticado anteriormente por Estados Unidos por considerar que grandes empresas norteñas como Amazon, Google, Facebook y Microsoft serán discriminadas de concretarse el impuesto digital.
En tanto, el reciente acuerdo alcanzado por la OCDE sobre la fiscalidad a las multinacionales pide desmantelar los impuestos digitales existentes considerados discriminatorios por Estados Unidos.
A principios de julio, 130 países y jurisdicciones de los 139 de esa entidad se sumaron a un acuerdo sobre reformar los impuestos a las grandes empresas globales.
La propuesta consiste en que las compañías con una facturación mundial superior a los 20 mil millones de euros y con una rentabilidad superior al 10 por ciento deberán abonar a los países donde obtengan ingresos superiores a un millón de euros una parte del impuesto a pagar.
A esto se une la aplicación de un tipo mínimo del impuesto de sociedades -en torno al 15 por ciento- a las empresas con una facturación de al menos 750 millones de euros.
rgh/tdd
