Por medio de un comunicado difundido por la oficina de su portavoz, el titular manifestó sus condolencias y solidaridad a las familias de las víctimas y a los Gobiernos y pueblos de los países afectados.
La ONU está dispuesta a contribuir con los esfuerzos de rescate y asistencia en curso, si es necesario, apuntó el diplomático portugués.
De acuerdo con reportes de prensa, ya se registraron más de 100 víctimas fatales tras las fuertes lluvias e inundaciones en regiones europeas, y Alemania figura entre los países más afectados.
El ministro alemán de Interior, Horst Seehofer, atribuyó las devastadoras inundaciones a la crisis climática y pidió acelerar las medidas para hacerle frente.
Nadie puede dudar que esta catástrofe está relacionada con la crisis climática, señaló en declaraciones a la revista Der Spiegel.
En tanto, el saldo de víctimas mortales en Bélgica se eleva a 15, mientras el Gran Ducado de Luxemburgo y Países Bajos también reporta fuertes lluvias y daños materiales sin fallecidos hasta ahora.
Por su parte, las autoridades de Suiza temen el desbordamiento de lagos y ríos en varias regiones del país, que podría traer lamentables consecuencias.
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