Es una muestra de reivindicación de los trabajadores públicos para dejar atrás las brechas salariales, refirmó el presidente de la Comisión de Economía y Presupuesto de la Asamblea Nacional (parlamento), en declaraciones al boletín digital Informe Pastrán.
El legislador por el gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) recordó que en la etapa anterior al de esa fuerza política en el poder (1990-2006) algunos funcionarios devengaban hasta 23 mil dólares mensuales y sobre sueldos ‘por debajo de la mesa’ y muchos trabajadores solo 50.
También rememoró que entre 2007 y 2017 la administración del FSLN año por año reajustaba al alza los sueldos de los empleados estatales, pero el intento golpista de 2018 con su gran afectación económica interrumpió aquel proceso.
Nicaragua que venía creciendo a un ritmo anual del 5.3 por ciento del Producto Interno Bruto, debido a aquella asonada cayó al 3.5 negativo.
Indicó el parlamentario que en la etapa 2018-2021 no fue despedido ningún trabajador del Estado, ni hubo afectaciones en la inversión social y pública, muy al contrario de las apuestas de los agoreros del desastre económico.
Gutiérrez señaló que el reajuste salarial ronda los 650 millones de córdobas (más de 18.4 millones de dólares) hasta el 31 de diciembre de este año y que para el 2021 sería de mil 430 millones de córdobas (por encima de los 40.5 millones de la moneda estadounidense).
Adelantó que esa medida tendrá un efecto multiplicador en la economía, porque el incremento salarial defiende el poder adquisitivo, especialmente de los trabajadores más pobres del país.
El reajuste anunciado por Ortega en el acto por el 42 aniversario de la Revolución Sandinista tendrá efecto a partir del 1 de agosto.
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