A las 01:13, hora local, de este jueves 22 de julio, aviones de combate israelíes dispararon desde el espacio aéreo del Líbano varios misiles contra al-Qusair y las defensas antiaéreas lograron derribar la mayoría de los cohetes y los daños se limitaron a pérdidas materiales sin lamentar muerte de civiles, detalló una nota de prensa emitida por el ente.
Fuentes militares consultadas por Prensa Latina informaron que los misiles israelíes apuntaron contra baterías de defensa antiaérea del ejército sirio y posiciones de combatientes del movimiento de resistencia libanesa (Hezbullah) en el aeródromo de al-Dabaa, ubicado cerca de la frontera con el Líbano.
Indicaron que los restos de dos de los misiles israelíes interceptados cayeron en las regiones libanesas de al-Majdal y Jubeil.
Se trata del segundo ataque israelí en menos de 48 horas, el último se perpetró por cazas F-16 desde la zona de Tanef controlada por Estados Unidos en el este de Siria.
De acuerdo con fuentes militares, seis de los siete misiles disparados por esos aviones fueron interceptados por sistemas Pantsir-S y Buk M2 de la defensa antiaérea siria.
Según denuncian las autoridades de Damasco, Israel perpetró durante 2020 unos 100 ataques contra territorio sirio y ya superan los 18 en lo que va del actual año.
El gobierno condenó esas acciones y deploró el silencio de las Naciones Unidas ante ellas, así como ratificó el derecho legítimo a defender la integridad y soberanía del territorio sirio por todos los medios legítimos.
Además, denunció que esas agresiones forman parte del apoyo directo ofrecido a las agrupaciones terroristas, en particular el Daesh o Estado Islámico, con el fin de desestabilizar nuevamente las zonas ya liberadas.
rgh/fm