Daños totales y parciales en viviendas, inundaciones, deslizamientos de tierra, desbordamiento de ríos, vías obstruidas y suspensión de clases constituyen las principales afectaciones en Costa Rica por las fuertes y constantes lluvias, que aún persisten y obligaron a más de 600 personas a refugiarse en albergues temporales.
Asimismo, el presidente Carlos Alvarado suspendió una gira por la provincia de Guanacaste (noreste) por el aniversario 197 de la Anexión del Partido de Nicoya (25 de julio de 1824) y regresó hoy a San José para atender personalmente la emergencia provocada por las precipitaciones, persistentes desde este jueves.
Los daños son de tal magnitud en algunas localidades que la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) decretó alerta roja (evacuación y respuesta) para los cantones -municipios- de Turrialba, Matina, Limón, Talamanca y Sarapiquí; la alerta naranja (movilización o contención) para el resto del Caribe y Zona Norte.
Además, la alerta amarilla (preparación) para el Valle Central y la alerta verde (informativa) para la Vertiente Pacífica.
La CNE adelanta que el Instituto Meteorológico Nacional, que calificó de extremo e inusual este temporal, pronosticó que las lluvias continuarán este sábado en el Caribe, la Zona Norte y el Valle Central, por lo que solicita a la población tomar las medidas de prevención y acudir a los albergues temporales habilitados.
Por otra parte, el Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori) reveló un acumulado de unas 170 réplicas del fuerte sismo, de magnitud 6,8, pero sin reportar pérdidas humanas, solo materiales por la caída de objetos.
A las 15:15, hora local, de este miércoles, el mencionado movimiento telúrico sacudió Costa Rica, pese a que el epicentro del evento natural fue localizado a 45 kilómetros al sur (en el mar) de Punta Burica, en Panamá, muy cerca de la frontera con este país.
Desde ese momento el Ovsicori ha detectado cerca de 170 réplicas con magnitudes superiores a los 3,6 e incluso una de 5,8 en los alrededores del primer sismo, que tuvo su epicentro muy cerca del reportado el pasado día 17, de magnitud 6,1.
Lo más preocupante es que los especialistas coinciden en que Costa Rica está en el ciclo de los terremotos de Golfito, de entre 35 y 40 años, con registros de esos eventos en 1904, 1941 y 1983. Este último ocurrió el del 2 de abril (Sábado Santo), con magnitud 7,6.
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