A pocas horas de asumir esa responsabilidad en plenario, reconoció en su primera entrevista de prensa, que el FA está en un momento complejo, difícil, no solo por la derrota electoral de noviembre de 2019, sino porque tuvo responsabilidad de gobierno durante 15 años, que implica un esfuerzo y desgaste.
Sin embargo sostuvo que hay un cambio muy importante en estos días con el resultado de la recopilación de casi 800 mil firmas para someter a referendo revocatorio 135 artículos de la cuestionada Ley de Urgente Consideración (LUC)
‘Con las firmas hubo un mensaje muy potente de la ciudadanía, de la gente, creo que la fuerza política recibe el mensaje, que es de aliento, a mirar más lejos, hacia adelante, que espero que marque los próximos tiempos’ afirmó al semanario Caras y Caretas.
Erlich expuso que los años pasan y es necesario una renovación de ideas, de personas, tienen que surgir temas de la juventud, también un cambio en la propia estructura que el Frente procesó en meses de discusión interna previa al Congreso nacional previsto para octubre.
Reafirmó la intención de que en el cercano Congreso la fuerza política haga la autocrítica de cara a la ciudadanía como señal de apertura, de transparencia con la militancia que empuja un protagonismo desde los comités de base.
Respecto a los desafíos próximos, opinó que la pandemia de la Covid-19 cambió totalmente el escenario, sin vuelta atrás de un mundo diferente en donde la palabra incertidumbre es la que define mejor los tiempos, los cambios de las reglas de juego en los procesos hegemónicos.
Señaló que para el Frente Amplio los aspectos sociales hay que mirarlos con un nuevo compromiso, tratar de construir un país integrado donde se pueda elegir un proyecto de vida pleno en cualquier rincón del territorio, ‘lo que buscan los jóvenes’.
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