En un pronunciamiento desde la Casa Blanca, el mandatario celebró la disminución del desempleo luego de conocer la recuperación de 943 mil puestos de trabajo en julio, y para mantener ese ritmo instó a la población a vacunarse ante el avance de la variante Delta del coronavirus SARS-CoV-2, causante de la dolencia.
El número de infectados aumentará antes de volver a bajar, es una pandemia de no vacunados, aseveró el gobernante y añadió que las muertes por Covid-19 son ahora un ‘precio innecesario’.
Este viernes, las autoridades estadounidenses revelaron que el 50 por ciento de la población está totalmente inmunizada; sin embargo, existe un sector reacio a recibir las dosis necesarias, principalmente republicanos y conservadores.
La secretaria de prensa de la administración, Jen Psaki, dijo a la prensa que estudian opciones para incentivar aún más la vacunación en las esferas de la salud y la industria.
De hecho, el gobierno federal, que es el empleador más grande del país, exige a los trabajadores el esquema completo de inoculación o someterse a pruebas regulares para detectar la Covid-19 antes de volver a las oficinas.
El número de personas hospitalizadas se triplicó en el territorio nacional durante el último mes, pasó de un promedio de aproximadamente 12 mil a casi 43 mil, de acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, siglas en inglés).
Tan solo los estados de Florida, Georgia y Louisiana suman cerca del 40 por ciento de los enfermos, que en el día de ayer superaron los 127 mil y los fallecidos suman ya más de 615 mil, reflejan rastreadores en línea de la pandemia.
Ello significa que la nación norteña mantiene una de las peores cifras en cuanto a número de infecciones comparado con el resto de los países del mundo.
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