Gastamos más de un billón de dólares durante 20 años en ese país, manifestó el mandatario este martes en declaraciones a la prensa en la Casa Blanca, y lamentó la muerte de miles de soldados en la contienda.
Biden instó al gobierno afgano a defender su territorio y prometió que Washington le mantendrá el apoyo aéreo y los reabastecerá con alimentos, equipos y fondos luego del repliegue total que se completará el 31 de agosto.
Varias capitales provinciales afganas cayeron en manos de los talibanes en los últimos cuatro días, mientras intensos combates se desarrollan en diferentes puntos del país.
Entretanto, el gobierno estadounidense analiza una nueva reducción de funcionarios en su embajada en Kabul debido a la situación de seguridad que se vive allí, confirmó el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.
Según cifras de ONU, desde principios de este año casi 360 mil personas fueron obligadas a desplazarse por el conflicto en Afganistán, un total que asciende a millones de personas desde el 2012.
La guerra en Afganistán, el conflicto bélico más largo de la historia de Estados Unidos, comenzó en octubre del 2001, luego de los ataques a las Torres Gemelas, en Nueva York, en busca de los responsables de los atentados y en una supuesta cruzada contra el terrorismo.
De acuerdo con analistas internacionales, la agresión de las tropas estadounidenses y de la OTAN agudizó la situación de inestabilidad política, económica y social en ese empobrecido país centroasiático.
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