La ampliación de los asentamientos perjudica a Israel y las posibilidades de alcanzar la paz, denunció en un comunicado la organización no gubernamental (ONG), fundada por exmilitares.
El ministerio de Defensa autorizó ayer edificar dos mil unidades habitacionales para los colonos y mil para familias palestinas en el Área C, una zona que representa el 60 por ciento de Cisjordania y está totalmente bajo el control administrativo y de seguridad israelí.
La aprobación de un puñado de casas para los palestinos solo tiene como objetivo tratar de reducir las críticas al Gobierno de Tel Aviv, subrayó Paz Ahora.
Durante años, Israel ha seguido una política de discriminación flagrante que no permite casi ninguna construcción palestina en el Área C, mientras promueve cada año la ampliación de los asentamientos, apuntó el texto.
La ONG destacó que la luz verde recibida para levantar las viviendas palestinas no puede encubrir la discriminación y no cambia el hecho de que Israel mantiene un régimen ilegal de ocupación en esos territorios.
Asimismo, advirtió que muchas de las unidades habitacionales judías aprobadas ‘ya se construyeron y existen sobre el terreno, por lo cual el plan pretende legalizarlas en retrospectiva’.
Paz Ahora y la ONG Ir Amim denunciaron esta semana los planes expansionistas de Israel en Jerusalén este, una zona reclamada por los palestinos como la capital de su futuro Estado.
Ambas agrupaciones rechazaron la propuesta de construir nueve mil viviendas en el antiguo aeropuerto de Atarot, ubicado entre las localidades palestinas de Kfar Aqab, Qalandia y A Ram.
Según datos oficiales palestinos, ese país edificó más de 31 mil viviendas en las 144 colonias ubicadas en Cisjordania y Jerusalén oriental desde 2004 y levantó otros 139 puestos de avanzada para futuros asentamientos.
En tanto, el número de colonos creció de 415 mil hace 17 años a 660 mil en 2019, pese al rechazo de la comunidad internacional y de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
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