En rueda de prensa con medios nacionales e internacionales, el mandatario atribuyó a la postura entreguista de la derecha opositora y la injerencia de Estados Unidos las causas principales del fracaso de anteriores procesos de acercamiento.
‘Hemos perseverado por el camino del diálogo, y por ese camino nos vamos a mantener ahora en México y después’, enfatizó el jefe de Estado en referencia al ciclo de conversaciones iniciadas este fin de semana con la mediación de Noruega.
Desde el Palacio de Miraflores (sede del Ejecutivo), Maduro aseveró que las negociaciones anteriores estuvieron signadas por el elemento intervencionista de Estados Unidos, para tratar de someter a la oposición ‘que lamentablemente en todas las oportunidades cedió al chantaje’, puntualizó.
El presidente de Venezuela manifestó que el Gobierno bolivariano siempre estuvo dispuesto a dialogar con los sectores más radicales de la derecha, incluso durante los actos más extremos como el intento fallido de instalar un gobierno paralelo en 2019, en la figura del dirigente opositor Juan Guaidó.
‘Los diálogos no han fracasado, la oposición ha pateado la mesa, han traicionado la palabra empeñada en todas las etapas anteriores’, subrayó el dignatario.
En contraste, Maduro reconoció la postura de un sector de la oposición que rompió con la facción extremista y procedió a negociar con las autoridades legítimas del país en septiembre de 2019, con una agenda centrada en los intereses nacionales.
Ese proceso de diálogo fue fructífero, permitió avanzar en la pacificación, el reencuentro y la reconciliación, y condujo a la renovación de la Asamblea Nacional (Parlamento) y a la instalación de la comisión parlamentaria el diálogo, destacó el mandatario.
Las partes involucradas en el proceso de diálogo en México suscribieron el viernes último un memorando de entendimiento que regirá las negociaciones, dirigidas a concretar acuerdos en el ámbito de derechos políticos, garantías electorales y cronograma para comicios observables.
Asimismo, las pláticas abordarán el levantamiento de las medidas coercitivas unilaterales implementadas contra Venezuela, la restauración al derecho de activos, la renuncia a la violencia y respuesta a sus víctimas, y garantías de implementación, seguimiento y verificación de lo acordado.
ga/wup
















