El objetivo es elevar la recaudación de la vía acuática mediante el desarrollo de su zona económica para convertirla en un área industrial y logística de alta tecnología, explicó la ministra de Planificación y Desarrollo Económico Hala El Said.
La funcionaria resaltó que por esa arteria circula el 10 por ciento del comercio marítimo global.
La Autoridad del Canal de Suez (SCA, por sus siglas en inglés) destacó a principios de agosto que en el recién finalizado año fiscal el tonelaje se disparó un 51,1 por ciento para llegar a mil 191 millones de toneladas.
A pesar de los efectos de la Covid-19 en el comercio mundial, el presidente de la SCA, Osama Rabie, explicó que esa ruta obtuvo un margen de beneficio de ocho por ciento.
Construido entre 1859 y 1869, el canal es una obra artificial navegable de 163 kilómetros de largo, que conecta a los mares Mediterráneo y Rojo.
En mayo último la SCA anunció el comienzo de los trabajos de dragado para extender una segunda vía que permite el tráfico bidireccional en una sección sur de la obra.
El plan es extender en 10 kilómetros la segunda pista del canal, abierta hace seis años, con el fin de llegar a los 82 kilómetros de largo.
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