El senador y líder del partido Cabildo Abierto, integrante de la coalición gubernamental, Guido Manini, fue principal oponente de un artículo contenido en el proyecto de Ley de Rendición de Cuentas que prevé trasladar 30 millones de dólares del INC en fideicomiso para regularizar asentamientos suburbanos.
Antes se aprobó en Cámara de Representantes con los votos en contra del Frente Amplio, y allí el presidente del cuerpo legislativo, Alfredo Fratti, acuñó lo acordado como ‘vestir un santo, desvistiendo otro’, pues el monto a desviar es irrisorio para la magnitud del problemas de las familias desposeídas que ocuparon terrenos.
Ya en el Senado, no solo la bancada cabildante manifestó oposición al debilitamiento del INC, sino también en las filas de otros socios de coalición, partidos Nacional y Colorado, hubo señales discrepantes.
Valor simbólico cobró en la semana la coincidencia de Manini y el expresidente José Mújica, de signos políticos muy diferentes, en un campamento de colonos, para respaldar a una institución creada en 1948 para arrendar tierras a familias rurales.
Manini se manifestó por buscar otra fuente de financiamiento para regularizar la situación de 240 mil uruguayos en asentamientos en periferias urbanas, lo que días después concretó con una propuesta alternativa de utilizar los Derechos Especiales de Giro (DEG) que otorgó al país hace un mes el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Explicó que consiste en 585 millones de dólares recibidos del FMI para ‘retirar emisiones de bonos del mercado’, con eso generar un ahorro en ‘el pago de intereses’, y según sus cálculos implicaría un estimado en 40 millones anuales para destinarlos al fideicomiso de vivienda.
Consultado por la prensa sobre las discordancias, el presidente Luis Lacalle Pou mostró intransigencia e indicó al Senado que apruebe el desvío de recursos de Colonización como única presunta solución para encarar los asentamientos irregulares.
Al día siguiente tampoco la mandataria en funciones Beatriz Argimón y el secretario de la Presidencia, en ausencia de Lacalle del país, acogieron la fórmula de Cabildo Abierto.
La Central sindical Pit-Cnt, en un paro nacional por reivindicaciones sociales, incluyó la defensa del Instituto Nacional de Colonización y entre los movilizados se sumaron cabalgatas de trabajadores rurales.
En el acto de clausura la colona Soledad Amaya manifestó que sin el INC ‘es imposible un modelo de desarrollo sustentable’ y añadió que ‘los adversarios son la especulación financiera, interés extranjero por nuestros recursos y la intermediación, intencionalidad artera, de quienes piden el desmantelamiento de un Estado protector’.
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