Los comentarios de Bennett son ‘una expresión de hostilidad hacia la paz y nuestros derechos a la independencia y la autodeterminación’, afirmó Jamal Nazzal, vocero de esa organización.
El funcionario denunció la política de colonización judía en Cisjordania y Jerusalén oriental, así como las continuas violaciones de los derechos humanos del pueblo palestino.
Para alcanzar la paz y la seguridad regional Israel debe cesar la construcción de asentamientos y la confiscación de tierras, subrayó.
Durante una entrevista esta semana con la radioemisora Kan, Bennett ratificó su rechazo a la creación de un Estado palestino, en abierto desafío a los reclamos de la ONU y de la comunidad internacional.
No veo ninguna lógica en sentarme a conversar con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abbas, manifestó también el dirigente del partido ultraderechista Yamina, cercano a los colonos judíos.
El primer ministro justificó su decisión por la postura de la ANP de respaldar las investigaciones de la Corte Penal Internacional por los crímenes cometidos por Tel Aviv en la franja de Gaza y Cisjordania, incluida Jerusalén oriental.
Además, acusó a Abbas de trasferir dinero a terroristas, término utilizado por las autoridades de este país para referirse a los milicianos que luchan contra la ocupación judía de las tierras palestinas.
Durante su visita el pasado mes a Estados Unidos, Bennett dejó claro su rechazo a conversar con el liderazgo palestino y a la creación de un Estado para ese pueblo.
Una semana después, durante una videoconferencia con dirigentes de organizaciones judías norteamericanas, ratificó su posición.
La comunidad internacional respalda la creación de un Estado palestino que incluya Cisjordania y la Franja de Gaza, con capital en Jerusalén oriental.
Esos territorios fueron ocupados por Israel durante la guerra de 1967 y desde entonces solo se retiró del enclave costero de Gaza, poblado por más de dos millones de personas, aunque mantiene un férreo bloqueo sobre la zona.
Según datos oficiales palestinos, las autoridades de Tel Aviv construyeron más de 31 mil viviendas en las 144 colonias ubicadas en la margen occidental y la zona este de Jerusalén desde 2004 y levantaron otros 139 puestos de avanzada para futuros asentamientos.
En tanto, el número de colonos creció de 415 mil hace 17 años a 660 mil en 2019, pese al rechazo de la comunidad internacional y de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
msm/rob
