Buques turcos realizaron maniobras científicas y de exploración al este de la isla de Creta el pasado día 16 lo que provocó la reacción de Atenas por considerar ilegal esos ejercicios, según el diario nacional Hurriyet.
Ahora Ankara responde a tales provocaciones bajo el pretexto de ‘proteger y defender sus derechos e intereses en su placa continental contra intentos ilegales y agresivos’, de acuerdo con fuentes no identificadas del Ministerio de Defensa.
Ambas naciones reclaman como suyo el derecho de explotación de los hidrocarburos en esa zona marítima lo que constituye punto de fricción desde hace años y en varias ocasiones elevó al máximo las tensiones.
Repetidos intentos de diálogo se frustraron a pesar de la intermediación de la Unión Europea, mecanismo regional al que pertenece Grecia, pues el trasfondo de las diferencias bilaterales trasciende el ámbito geográfico.
Discrepancias en temas religiosos, culturales y diplomáticos enrarecen la relación que por momentos se torna beligerante y amenaza con un enfrentamiento armado en el área, pese a que las partes manifiestan por separado su disposición al diálogo
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