Las operaciones binacionales que se llevan a cabo en Tulcán, provincia ecuatoriana de Carchi, limítrofe con el departamento de Nariño, en el territorio vecino, también buscan mejorar la seguridad ciudadana.
En las labores trabaja el batallón Galo Molina, destinado a garantizar la tranquilidad de los residentes en el área limítrofe.
Al respecto, el comandante Enrique Sandoval precisó que las tareas consisten en revisión para decomiso de armas blancas, mercadería variada de contrabando y aprehensión de drogas acopiadas en viviendas aledañas al territorio colombiano, destinadas al microtráfico.
Como resultado, los efectivos han retenido, además de esos productos, motocicletas que realizan transporte informal en vías alternas.
Asimismo, las autoridades han clausurado algunos inmuebles dedicados al alojamiento y bodegas de almacenamiento, ubicados alrededor de la terminal terrestre de Tulcán, por hechos violentos reportados por la ciudadanía y ser focos de delincuencia.
El pasado 30 de agosto uniformados de ambos países realizaron una operación en la Frontera Norte, que derivó en la incautación de gran cantidad de productos sin documentación (material escolar, ropa, zapatos, cerveza, entre otros), así como sustancias estupefacientes sujetas a fiscalización.
Asimismo, hubo retención de automotores y fueron registrados decenas de ciudadanos extranjeros, quienes evadieron los filtros migratorios y pretendían ingresar al país de forma ilegal.
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