La canciller federal Angela Merkel seguirá en su puesto hasta que tome posesión su sucesor, declaró ante la prensa el portavoz del Ejecutivo, Steffen Seibert, quien no comentó más sobre el tema.
Olaf Scholz, vicecanciller del actual ejecutivo es el candidato del SPD para la jefatura del gobierno, aunque esa opción depende de las alianzas que las dos fuerzas políticas más votadas el domingo sean capaces de conciliar.
La Constitución alemana prevé que los dos partidos más votados puedan encabezar el Gobierno en un país donde el canciller federal es elegido por el Bundestag (Cámara Baja del Parlamento).
Los socialdemócratas obtuvieron 206 de los 735 escaños en el legislativo; la actual coalición gobernante, integrada por Democristianos y Socialcristianos, alcanzó 196 bancas, mientras Los Verdes totalizaron 118 puestos.
El 26 de octubre tendrá lugar la sesión constitutiva del nuevo Parlamento, tras lo cual, según el proceder habitual, Merkel y sus ministros seguirán en funciones por encargo del presidente del país Frank-Walter Steinmeier hasta la toma de posesión del siguiente ejecutivo.
El periodo máximo para esa transición hasta ahora fue de 171 días y ocurrió entre los comicios generales de 2017 y el inicio del cuarto y último mandato de Merkel como canciller federal, aunque el proceso no tiene límite de tiempo fijado de manera oficial.
La composición del nuevo legislativo destaca por el incremento en el número de diputados de origen migrante que ahora ocupan el 11,3 por ciento de los escaños, según datos recopilados por Mediendienst Integration entidad centrada en temas de refugiados, migración y discriminación.
En ese escenario los líderes de Los Verdes y los liberales del FDP comenzaron conversaciones de cara a la formación del previsible gobierno de coalición que regirá el país por los próximos cinco años. A la primera cita asistieron el líder del FDP, Christian Lindner, y el secretario general, Volker Wissing; mientras por los ecologistas estuvieron presentes los copresidentes Robert Habeck y Annalena Baerbock.
El objetivo declarado de ambas partes es acordar líneas básicas de cooperación política que sirvan de requisito para un ‘nuevo comienzo’ de la política gubernamental en Alemania.
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