La secretaría señala que se trata de padecimientos hereditarios, anormalidades al nacer, patologías cardiacas, diabetes y obesidad mórbida grado tres, VIH/Sida, trasplantados, síndrome de Down, autismo, retraso mental o situaciones ligadas al embarazo adolescente, entre otras distribuidas en nueve apartados.
La planeación operativa corresponde a cada institución federal fuera incluso del sistema de salud pero ligadas a este como las secretarías militares, Pemex y otras más.
El grupo asesor sugirió mantener unidades de vacunación en cada centro clínico de manera permanente y usar un método de citas con base en un pre registro de inoculación en la que esa población deberá inscribirse como perteneciente al grupo de riesgo.
Las instituciones deberán promover también el pre registro de sus derechohabientes o usuarios. Cada adolescente que acuda a un sitio de vacunación debe presentar constancia del diagnóstico de una de las enfermedades clasificadas expedida por personal médico tratante.
Aun así, en cada sitio de vacunación habrá personal profesional para verificar las indicaciones de vacunación para adolescentes que no están en los censos institucionales.
Las autoridades determinaron usar la vacuna BNT162b2 de Pfizer que, hasta la fecha, es la única plataforma vacunal en México que ha demostrado seguridad e inmunogenicidad en personas de 12 años en adelante, y cuenta con la aprobación de la Comisión Federal especializada.
Están enlistados nueve grupos vulnerables: obesidad, cáncer, embarazos y VHI, enfermedades crónicas, cardíacas congénita o adquirida, hipertensión arterial y otros.
En un segundo se incluyen quienes padecen enfermedad pulmonar crónica, entre éstas, discinesias ciliares, es decir, patología hereditaria caracterizada por un defecto estructural de las células ciliadas presentes en los tejidos respiratorios y gonadal, y muchas más hasta llegar a 44.
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