La cancillería argentina anunció la reapertura de ingresos de extranjeros por vías terrestres a partir del 1 de noviembre, lo que significa la reanudación del cruce de residentes de los territorios Salto, Paysandú y Río negro para comprar ventajosamente.
Ante tal perspectiva sus respectivos intendentes, Andrés Lima, Nicolás Olivera y Omar Laftuf reclamaron desde semanas atrás al Poder Ejecutivo, la aplicación de medidas paliativas para prevenir pérdidas en las economías locales.
Con el voto de la Cámara de Senadores se aprobó por unanimidad la iniciativa de exoneraciones tributarias al comercio minorista radicado hasta 60 kilómetros de un paso de frontera terrestre.
Según sus promotores esas regiones del país se encuentra expuestas de manera permanente a estabilidades, por las variantes en el tipo de cambio, alto nivel de formalismo, competitividad y diferencias de precios de los productos, más favorables para los consumidores uruguayos en el lado argentino.
Las exoneraciones comprenden el 100 por ciento de los aportes patronales jubilatorios a la seguridad social, la prestación tributaria unificada al Ministerio de Desarrollo Social y el pago del Impuesto al Valor Agregado a la pequeña y mediana empresa.
Asimismo incluye el Impuesto a las Rentas de las Actividades Económicas y se exime del pago del Impuesto al Patrimonio.
Las afectadas intendencias limítrofes abrigan expectativas de evitar cierres de centros laborales y desempleos después de un año con 60 mil uruguayos que perdieron sus fuentes de sustentación por el impacto económico de la pandemia de la Covid-19.
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