En una declaración transmitida por la televisión nacional el jefe de gobierno alegó que su decisión responde al interés de mantener la estabilidad nacional, al tiempo que negó cualquier implicación en esos hechos.
Quiero ceder mi lugar para evitar el caos, afirmó Kurz, quien propuso al ministro de Relaciones Exteriores, Alexander Schallenberg, para sucederlo.
El miércoles trascendió la apertura de una investigación por corrupción contra el primer ministro de 35 años quien negó las acusaciones y denunció que se trataba de alegaciones ‘fabricadas’.
Un día más tarde Los Verdes, socios minoritarios del partido conservador en el poder, pusieron en duda la capacidad de Kurz para continuar como canciller federal.
Ahora el joven político continuará como líder de su partido y principal legislador de esa fuerza política en el Parlamento, según sus palabras.
Analistas consideran que desde esas posiciones seguirá influyendo en la política gubernamental.
La propuesta de Schallenberg como jefe del gobierno recibió el respaldo del líder de los Verdes y vicecanciller federal Werner Kogler quien manifestó satisfacción por la noticia.
Creo que este es el paso correcto para el trabajo futuro del ejecutivo, dijo Kogler en un comunicado, y agregó que tuvo una relación ‘muy constructiva’ con el actual ministro de Relaciones Exteriores.
mem/ehl