En la Casa de las Flores, junto al Museo de Historia de Yugoslavia, donde está la tumba del legendario líder guerrillero, Plasencia y la delegación que le acompaña depositaron una ofrenda floral, guardaron un minuto de silencio y recorrieron las salas del lugar, plagadas de testimonios sobre la trayectoria histórica de Tito.
El jefe de la diplomacia venezolana firmó el libro de visitas del mausoleo, en el que expresó el honor de estar en tan emblemático lugar para rendir tributo al gran estadista.
Acompañaron a Plasencia los viceministros de Relaciones Exteriores para Temas Multilaterales, Rubén Darío Molina, y África, Yuri Pimentel; el encargado de Negocios ante la Unión Europea, Yván Gil, y el embajador venezolano en Serbia, Dimas Alvarenga.
En una breve alocución, el jefe de la misión diplomática en Belgrado recordó que Tito desempeñó un papel fundamental en la fundación del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL), junto con los líderes de la India, Jawaharlal Nehru; Indonesia, Ahmed Sukarno; Egipto, Gamal Abdel Nasser, y Ghana, Kwame Nkrumah.
Remarcó que el Comandante Hugo Chávez junto con el presidente, Nicolás Maduro, trabajaron arduamente para su reactivación.
El acto de homenaje forma parte de la amplia agenda diplomática que cumple el canciller en la nación balcánica durante su visita a la República de Serbia, en el marco de la Reunión Conmemorativa de Alto Nivel por el sexagésimo aniversario del MNOAL.
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