‘Esta comisión produjo resultados, tenemos denuncias, acciones penales y civiles en curso, autoridades apartadas’, afirmó Aras al tener en sus manos el documento conclusivo de la CPI que investigó durante seis meses el desempeño del Ejecutivo frente a Covid-19 que cobró más de 606 mil muertes y contagió a cerca de 22 millones.
Precisó que la llegada al Ministerio Público de ‘este material, el cual involucra personas aforadas, contribuirá a darle la agilidad necesaria a la apreciación de los hechos susceptibles de castigo civil, penal o administrativamente’.
También está prevista en los próximos días la remisión del informe al titular de la Cámara de Diputados, Arthur Lira, al del Senado, Rodrigo Pacheco, y a los ministerios públicos de Río de Janeiro y Sao Paulo.
El dictamen se enviará asimismo al Tribunal Penal Internacional de La Haya.
Aprobado la víspera por siete votos frente a cuatro, el texto desmenuza en cerca de mil 300 páginas el resultado de 69 reuniones de la comisión.
La junta de 11 senadores verificó graves anomalías que la indujeron además a enunciar nueve imputaciones contra Bolsonaro, entre ellas la de crimen contra la humanidad.
También otras denuncias se enfilan contra tres de los hijos del gobernante de tendencia ultraderechista, ministros, exministros, diputados federales, médicos, empresarios y el gobernador del estado de Amazonas, Wilson Lima.
Dos empresas que firmaron contratos con el Ministerio de Sanidad (Precisa Medicamentos y VTCLog) fueron además consideradas responsables. En total 79 personas y ambas compañías aparecen en el contenido conclusivo de la CPI.
Senadores aliados a Bolsonaro refutaron la tesis de que el jefe de Estado era responsable del agravamiento de la pandemia en Brasil y presentaron votos particulares en los que pidieron la indagación sobre la actuación de gobernadores y alcaldes. El informe solicita por otra parte que la abogacía del Senado pida la ‘interrupción inmediata de la continuidad delictiva’ a través de la retirada del exmilitar de todas las redes sociales para la ‘protección de la población brasileña’.
Para el senador Alessandro Vieira, es cierto que Bolsonaro no creó la Covid-19, pero ‘igual de evidente’ que se esforzó diáfanamente por acelerar la propagación del virus.
‘Es una acción consciente y confesada. Si no me equivoco, hay más de 200 videos adjuntos a los expedientes en los que el presidente de la República, de forma metódica, ensayada, preparada, organizada, utilizando las herramientas del Estado, hizo que los brasileños se protegieran menos’, denunció Vieira.
mem/ocs/gdc