En un documento llamado dossier Steele, Igor Danchenko reunió pistas sobre posibles vínculos entre el expresidente Donald Trump y Rusia, y los esfuerzos del magnate neoyorkino por quitarle la victoria a la candidata demócrata Hilary Clinton.
El arresto es parte de la investigación especial dirigida por el abogado John H. Durham, designado durante la era del magnate neoyorkino (2017-enero 2021) para escudriñar la investigación, escrita realmente por el ex agente de inteligencia británico Christopher Steele.
Se trata de un compendio de 35 páginas de rumores y afirmaciones no probadas que sugieren que Rusia interfirió en las elecciones de 2016 con la complicidad de Trump para derrocar a Clinton.
De acuerdo con fuentes anónimas familiarizadas con el suceso, Danchenko fue detenido por mentirles a los agentes del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) durante las entrevistas realizadas entre enero de 2017 y noviembre de ese año.
Según la acusación, Danchenko dijo falsamente a los investigadores que nunca se comunicó con una persona radicada en Estados Unidos para elaborar las denuncias incluidas en el dossier, cuando en realidad sí lo hizo.
Los agentes federales aseguran que el analista tenía vínculos con el Partido Demócrata y que este financió indirectamente la investigación del ex agente británico, empleador de Danchenko.
El FBI afirma que gran parte del material contiene información de tercera mano y que Danchenko -que nació en Rusia pero vive en Estados Unidos- especuló durante las entrevistas que le hicieron en 2017 como parte de las investigaciones del caso.
En un diálogo con The New York Times en 2020, el acusado defendió la integridad de su trabajo, diciendo que se le había encomendado la tarea de reunir «inteligencia en bruto» y que simplemente se la pasaba a Steele.
El analista ruso, cuya identidad fue revelada en julio del 2020, fue responsable de una de las afirmaciones más conocidas del Dossier Steele: que existe una supuesta cinta sexual de Trump con prostitutas en el hotel Ritz-Carlton de Moscú en 2013.
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