Que no sea el espejo de un antropocentrismo despótico, sino un nuevo canto de las creaturas, donde encuentra concreción efectiva una ecología integral, indicó el sumo pontífice al intervenir en la inauguración de un nuevo espacio expositivo en la Biblioteca del Palacio Apostólico.
“Todos. Humanidad en Camino” es el título de la primera muestra realizada por el artista romano Pietro Ruffo, la cual propone un recorrido que parte de la cartografía de viaje para arribar a los mapas utópicos y alegóricos, inspirada en la encíclica papal Hermanos Todos, señaló una nota de la Sala de Prensa de la Santa Sede.
A partir de referencias bíblicas, el papa expuso sus puntos de vista sobre la belleza la cual, dijo, no es una ilusión fugaz de una apariencia o un adorno, sino que nace de la raíz de la bondad, la verdad y la justicia que son sus sinónimos.
Al expresar su regocijo por la inauguración de la nueva sala de exposiciones, el pontífice deseó “que su luz resplandezca” a través de la ciencia, pero también de la belleza.
En este cambio de época acelerado por la pandemia, la humanidad necesita de nuevos mapas para descubrir el sentido de la fraternidad, la amistad social y el bien común, manifestó el pontífice al resaltar que la lógica de los bloques cerrados es estéril y llena de errores.
Por otra parte, destacó el mensaje de la primera muestra como un diálogo construido con obras pertenecientes a la Biblioteca y trabajos de un artista contemporáneo, lo cual saludó y agradeció.
En ese sentido, apreció esa “apuesta por el diálogo”, al tiempo que subrayó el significado de la vida como el arte del encuentro y puntualizó que las culturas enferman cuando se encierran en sí mismas, “cuando pierden la curiosidad y la apertura hacia el otro, cuando excluyen en lugar de integrar”.
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