La encuesta tiene como fin identificar a la población en mayor condición de vulnerabilidad, en particular, mujeres indígenas, jefes de familia, población con discapacidades y niños con algún grado de desnutrición para incluirlos en diferentes programas sociales del Gobierno e incluso, formular otros diferenciados.
De acuerdo con Juan Carlos Girón, director de Coordinación y Evaluación, la recolección de datos se realiza de puerta en puerta para garantizar que se cumplan los objetivos propuestos.
El plan piloto arrancó el 18 de octubre en el municipio San Gaspar Ixchil (Huehuetenango) con la presencia del presidente Alejandro Giammattei y representantes aquí del PNUD, y después prosiguió en Santa Cruz La Laguna (Sololá) hasta llegar ahora a San Bartolomé Jocotenango (Quiché).
Están incluidos, además, Santa Apolonia (Chimaltenango), así como Santa María Chiquimula y Santa Lucía La Reforma (Totonicapán), todos con altos índices de pobreza y pobreza extrema entre su población.
Las gestiones para la puesta en marcha del levantamiento de información socioeconómica y multidimensional de 20 mil familias en estos seis municipios priorizados iniciaron en marzo de este año y hasta ahora se cumplieron cuatro de las siete fases, diseño de Fichas de Evaluación de Condiciones Socioeconómicas, denominadas Fecs, Gestión Territorial, Consultas Comunitarias y Actualización Cartográfica Digital, de acuerdo con el Mides.
Actualmente transcurre la recolección de información de campo con las Fecs digitales, un paso que contó con la validación de las agencias de las Naciones Unidas en este país.
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