“Nuestro rescatista, Alexander Zakovriashin, fue encontrado vivo. Puedo ver esto como un milagro. Pero el milagro lo hace nuestra gente”, indicó el alto funcionario ruso al frente de las labores de los socorristas en ese territorio siberiano, según la agencia de noticias TASS.
Un total de 52 muertos y 63 heridos fueron registrados hasta el momento a causa del hecho, el cual fue provocado por la inflamación de polvo de carbón en un conducto de ventilación, después de lo cual el humo se extendió por toda la mina, indicaron investigaciones preliminares.
Este viernes los equipos de rescate tomaron muestras de aire para analizar el riesgo de explosión en el yacimiento de carbón, porque ayer esa posibilidad existía, aseguró el ministro interino de Emergencias, Alexandr Chupriyán, indicó la agencia de noticias Sputnik.
En la mañana del jueves, en el momento de la tragedia, 285 personas se encontraban en el interior de la mina. Los rescatistas debieron interrumpieron la búsqueda ante la amenaza de un nuevo estallido.
Las autoridades regiones informaron que la mayoría de los mineros lograron salir a la superficie, aunque 46 trabajadores y seis socorristas murieron debido al accidente.
Por su parte, Vitali Jeraskov, segundo jefe de Salud de ese territorio ruso, indicó que un total de 50 personas fueron trasladadas a hospitales y otros 13 afectados reciben tratamiento ambulatorio.
El informe de la propagación del humo y una explosión posterior en la galería de ventilación de la mina se conoció a las 09:08, hora local del jueves. La humareda se produjo a una profundidad de 250 metros, indicó el Ministerio de Situaciones de Emergencias ruso.
En la región siberiana de Kémerovo fueron declarados tres días de luto a partir de este viernes.
jha/mml