Según el sondeo el 37 por ciento de los entrevistados consideró que la vida y otros indicadores sociales y económicos cayeron en los tres años transcurridos de la gestión del mandatario.
Cifra similar opinó que la situación es la misma a la de la etapa anterior, cuando al frente del país estaba Michel Temer (2016-2018), mientras solo un 22 por ciento se decantó por mejorías.
PoderData señala que en la encuesta realizada del 6 al 8 de diciembre las tasas variaron en torno a 1,8 puntos porcentuales en comparación con estudio similar hecho en enero de ese año, lo que confirma la baja aceptación de las políticas de Bolsonaro.
La publicación apuntó que esa percepción negativa está muy vinculada al escenario económico y la reducción del poder adquisitivo de las mayorías, afectada por la inflación y el alza de productos de primera necesidad.
Medios locales dedican espacios en estos días a la escalada de los precios de los alimentos, combustibles para cocinar y para los vehículos.
Para el sondeo PoderData entrevistó vía telefónica a tres mil personas, distribuidas en 489 municipios de los 27 estados del país.
La víspera una encuesta de la consultora Quaest informó que si Bolsonaro se presentara como candidato a las elecciones presidenciales de 2022 perdería ante el expresidente Luis Inacio Lula da Silva.
El mandatario, afiliado hace poco al Partido Liberal, sumaría solo el 23 por ciento de los votos válidos, mientras Lula, por el Partido de los Trabajadores, tendría un respaldo en torno a los 46 puntos porcentuales.
En el sondeo de Quaest, aplicado a dos mil personas, también fue valorada de negativa la labor del ejecutivo, la mitad de los encuestados argumentó una deficiente gestión de la pandemia de la Covid-19, el combate a la corrupción, y la reducción de violencia y la criminalidad, entre otras faltas.
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