Los rehenes fueron encontrados por la población en Morne Cabrit, al sur de la capital y entregados a las autoridades policiales, de acuerdo con los medios locales.
El grupo inicialmente integrado por 17 personas fue retenido el 16 de diciembre, en Ghantier, a unos 30 kilómetros de la capital. A finales de noviembre fueron liberados dos de ellos, y otros tres la semana pasada.
Las autoridades aún no confirmaron si se pagó el rescate de 17 millones de dólares exigido por la pandilla, que incluso amenazó con asesinar a los secuestrados si no cumplían sus demandas.
El menor de los rehenes tenía ocho meses de edad, y en el grupo figuraban otros cuatro infantes de tres, seis, 13 y 15 años, respectivamente, de acuerdo con la organización religiosa Christian Aid Ministries.
La inseguridad y violencia crecieron en Haití este año, con unos 949 secuestros reportados por el Centro de Análisis e Investigación en Derechos Humanos (Cardh), lo que sitúa al país a la cabeza de las naciones con más raptos per cápita.
La cifra representa un aumento de casi el 20 por ciento con respecto a 2020, y los casos se multiplicaron especialmente tras el asesinato del presidente Jovenel Moïse ocurrido el 7 de julio en su residencia de la capital.
El Cardh advirtió en un informe publicado la víspera que el número total de secuestros podría ser mayor, pues muchas de las familias no denuncian por miedo a los agresores.
msm/ane