En un comunicado divulgado en la franja de Gaza y firmado por su secretario general Ziyad al Nakhala, el grupo consideró que la muerte de Hawash será considerada un asesinato ante lo cual iniciarán las hostilidades.
“Todas las opciones están abiertas y sobre la mesa en caso de que la ocupación (Israel) continúe postergando y evitando sus responsabilidades”, subrayó el texto.
El primer ministro de la Autoridad Nacional Palestina, Mohammad Shtayyeh, instó este sábado al vecino país a liberar a Hawash, mantenido tras las rejas bajo la política de detención administrativa.
Criticada por la ONU y grupos de derechos humanos, la llamada detención administrativa es utilizada por Tel Aviv para arrestar a palestinos por intervalos renovables que suelen oscilar entre tres y seis meses sobre la base de pruebas no divulgadas que incluso el abogado del acusado tiene prohibido ver.
La televisora libanesa Al Mayadeen reveló que la Jihad Islámica y en especial su ala militar: las brigadas Al Quds, evacuaron sus bases en la franja de Gaza luego del lanzamiento esta mañana de dos cohetes.
Los misiles cayeron frente a las costas de Tel Aviv sin causar víctimas y ni daños materiales. Las milicias palestinas afirmaron que no fue un ataque intencional sino un error.
Hace una semana, una docena de grupos palestinos desarrollaron maniobras a gran escala en Gaza, en medio de crecientes tensiones y amenazas de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) de lanzar una nueva agresión.
Días antes, representantes de las milicias del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) y de la Jihad Islámica realizaron un encuentro para coordinar sus operaciones ante un posible enfrentamiento con las FDI.
En diciembre el ala militar de Hamas, las brigadas Ezzedin al Qassam, ejecutó también un ejercicio en solitario llamada Escudo de Jerusalén.
Desde que ese grupo conquistó el poder del enclave costero, en 2007, el vecino Estado aplica un férreo bloqueo contra el territorio, pese a las críticas de la comunidad internacional por las consecuencias humanitarias para sus habitantes.
Ambas formaciones advirtieron recientemente de una nueva escalada si continúa el cerco y el proceso de reconstrucción de la franja, devastada en mayo último por 11 días de intensos bombardeos israelíes, que causaron la muerte a más de 250 personas y centenares de heridos.
Ante las presiones internacionales, el Estado judío prometió tras la ofensiva permitir la entrada de productos básicos, materiales de construcción y dinero para la rehabilitación, pero hasta la fecha con diversas justificaciones limitó el proceso.
mem/rob