Las agencias de noticias Maan y Al Quds revelaron que representantes de alto rango del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas), que controla el enclave costero, y de Yihad Islámica se reunieron anoche en Gaza para evaluar la situación.
De forma paralela, la máxima figura de Hamas, Ismael Haniyeh, conversó por teléfono con el secretario general de la Yihad Islámica, Ziad al Nakhala, para discutir el tema, anunció el primer grupo en un comunicado.
Ambas formaciones responsabilizaron en los últimos días a Israel por la posible muerte de Abu Hawash, de 40 años, y advirtieron de las consecuencias.
En declaraciones a la agencia oficial Wafa, el portavoz de la Autoridad de Asuntos de Prisioneros y Exprisioneros, Hassan Abd Rabbo, afirmó este martes que el estado de salud de detenido es crítico.
Abu Hawash está en coma intermitente y sufre de visión débil e incapacidad para hablar, además de problemas cardíacos y atrofia muscular, subrayó.
En medio de esa situación, la aldea cisjordana de Dura, de donde es oriundo el palestino, comenzó esta mañana una huelga general para reclamar su liberación.
En diversas zonas de la franja de Gaza y la Margen Occidental se intensificaron las protestas y marchas en solidaridad con el detenido.
La Unión Europea, el Comité Internacional de la Cruz Roja y otros organismos globales también mostraron preocupación por la salud el recluso, quien reclama su excarcelación.
Abu Hawash está tras las rejas bajo la política de detención administrativa, criticada por la ONU y grupos de derechos humanos, porque permite a Israel arrestar a palestinos por intervalos renovables que suelen oscilar entre tres y seis meses sobre la base de pruebas no divulgadas que incluso el abogado del acusado tiene prohibido ver.
El parlamentario israelí de izquierda Ahmed Tibi advirtió ayer de una tercera Intifada (como se conocen las revueltas palestinas) ante la evidente tensión en los territorios ocupados por el incremento de los ataques del Ejército y los colonos judíos.
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