Según el decreto esta organización informal, creada en 2017, cuenta con al menos una veintena de miembros, y sería la responsable de “numerosos y recurrentes actos violentos”, “propagar un discurso abiertamente racista” y “difundir regularmente imágenes con los símbolos de la ideología nazi”.
La última de estas acciones tuvo lugar el pasado 5 de diciembre, durante el primer mitin de campaña del candidato a presidente Eric Zemmour, cuando unas 50 personas identificadas por la policía como pertenecientes a los Zouaves golpearon salvajemente a varios activistas de SOS Racismo, por exhibir camisetas con el lema “No al racismo”.
Este grupo ultraviolento fue felicitado por el servicio de seguridad de Zemmour y y sus miembros posaron para una foto a la salida del mitin, coreando “estamos en casa” según documentó un periodista de la agencia France Press.
Según reconoció el ministro las personas que integran esta “agrupación de facto” provienen del antiguo sindicato de estudiantes de extrema derecha (GUD) o de Action Francaise, es decir, “de movimientos de ultraderecha reconocidos”.
Al tiempo, su líder, Marc de Cacqueray-Valménier de 23 años, detenido por apalear a los militantes antirracistas, difundió a fines de 2020 una foto en redes sociales con un fusil Kalashnikov y símbolos y tatuajes de las SS nazis, con el fin de reclutar una “brigada de voluntarios extranjeros” y luchar en la región secesionista armenia de Nagorno-Karabaj contra el «invasor» musulmán.
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