De acuerdo con el diario Global Times, el androide funciona con inteligencia artificial y mediante una cámara 3D puede localizar automáticamente la mejor zona para la inyección y completar el proceso en medio segundo sin causar dolor.
Mientras, Qi Peng, miembro del equipo científico, detalló que su sistema es válido para las vacunas subcutáneas y las intramusculares, y en un futuro podría apoyar la inmunización en las instituciones de salud.
Pero consideró necesario realizar más pruebas que avalen la seguridad clínica y efectividad antes de incorporarlo al sector sanitario.
China creó al robot luego que la universidad de Waterloo, en Canadá, presentó a finales de 2021 a Cobi, el cual completó con éxito la primera inyección intramuscular robótica autónoma.
El mecanismo de ese androide consiste en aplicar un chorro de suero a alta presión que atraviesa una abertura en la piel del ancho de un cabello humano.
Además, usa sensores LiDAR, la misma tecnología empleada por los vehículos sin conductor para trazar el mapa de la carretera.
Sus creadores aseguran que las soluciones autónomas como Cobi podrían proteger a los trabajadores de la salud, reducir los costos de la atención médica y mejorar los resultados de los pacientes.
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