En un mensaje publicado en la red social Twitter, la también vicepresidenta de Colombia hizo mención a la muerte de una niña venezolana en la frontera entre México y Estados Unidos y consideró este fenómeno una consecuencia de la supuesta pérdida de la democracia en Venezuela.
“La verdad es que no le duele, ni a usted ni al gobierno necrófago al que representa. Ustedes se frotan las manos ante tragedias como esta porque la miopía política que les caracteriza les hace creer que, con esas acciones burdas y rastreras, podrán obtener algún rédito político”, respondió Plasencia en la plataforma comunicacional.
El ministro de Relaciones Exteriores reiteró que el Ejecutivo bolivariano trabaja a diario para revertir las condiciones coyunturales que, desde el exterior, promueven la migración venezolana.
Asimismo, el Canciller exigió a su homóloga de Colombia que se abstenga de manipular con el dolor de una familia venezolana.
“Si tanto le preocupa el bienestar de nuestros conciudadanos, dejen de amparar en su territorio a quienes apuestan por la destrucción de Venezuela para hacerse con los recursos de nuestro pueblo”, subrayó el titular.
Empleado con frecuencia como argumento para justificar ataques políticos y la injerencia en los asuntos internos de esta nación, el fenómeno migratorio escaló en intensidad durante los últimos años, acentuado por los efectos de las medidas coercitivas unilaterales de Estados Unidos.
Al intervenir el pasado año ante el 112 Consejo de la Organización Internacional para las Migraciones, Plasencia denunció que la inducción de una supuesta crisis de refugiados, con impacto sobre los Estados vecinos, constituye un elemento central en la estrategia de Washington contra Venezuela.
En tal sentido, Plasencia condenó los intentos de validar la narrativa de que este país constituye un “problema regional”, con el fin de legitimar una política intervencionista.
Además, cuestionó la postura de algunos gobiernos de América Latina que alimentan una campaña de estigmatización contra el gentilicio venezolano.
Ante este escenario, el Gobierno de Venezuela mantiene el Plan Vuelta a la Patria como una solución duradera y efectiva a la hora de garantizar el retorno voluntario a los miles de ciudadanos que manifestaron su voluntad de volver a su tierra natal.
Gracias a este programa, desde finales de 2018 regresaron de manera segura cerca de 28 mil connacionales, provenientes en su mayoría de Brasil, Perú, Ecuador, Chile y Argentina, en decenas de vuelos humanitarios organizados por la aerolínea estatal Conviasa.
Asimismo, las autoridades venezolanas estiman en más de 300 mil los ciudadanos de este país que regresaron por vía terrestre a través de las fronteras con Colombia y Brasil en medio de la pandemia de Covid-19.
gas/wup
