Tras el despliegue este fin de semana de tres mil soldados adicionales en territorio europeo, el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, negó este domingo a la cadena Fox News que el propósito sea comenzar una guerra contra Moscú por el conflicto con Ucrania.
En su opinión, el objetivo es defender a los países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
No obstante, insistió en afirmar que una invasión rusa a Ucrania podría ocurrir “en cualquier momento” y Washington “está trabajando duro para preparar una respuesta».
Sullivan reiteró que el gobierno estadounidense liderado por Joe Biden brinda apoyo material a Kiev y manifestó que aún existe la opción diplomática para desescalar las tensiones con Moscú.
Paralelamente, observadores aseguran que la prensa al servicio de la Casa Blanca crea una crisis y “magnifica, miente y enciende el fuego” contra la potencia euroasiática con el objetivo final de proporcionarle ganancias al complejo militar industrial estadounidense.
Este domingo, por ejemplo, la agencia Associated Press citó a dos funcionarios estadounidenses según los cuales el ejército ruso pretende a mediados de mes tener todo listo para tener la opción de intervenir a gran escala en el territorio ucraniano.
Las declaraciones constantes sobre una posible incursión militar rusa es una matriz de opinión que el gobierno de Putin rechaza y asegura que sus tropas se mueven dentro de su territorio con fines puramente defensivos.
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