El mandatario ruso señaló que durante los disturbios y el intento de golpe de Estado en Kazajastán, en las primeras semanas de enero, ese país se convirtió en víctima de algunas bandas internacionales que se aprovecharon de su difícil situación.
“Nos reunimos con usted antes del Año Nuevo, nada presagiaba el desarrollo de tales eventos”, recordó Putin, según el sitio oficial de la Presidencia rusa en Internet.
Apuntó que la situación en la nación centroasiática se restableció y advirtió que Rusia, como uno de los países miembros de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva, prestó su apoyo al Gobierno kazajo.
El jefe de Estado ruso significó que el papel principal en la solución del conflicto lo desempeñó el propio liderazgo de Kazajastán, junto a los organismos encargados de hacer cumplir la ley y las Fuerzas Armadas.
Señaló que las autoridades de ese país tendrán que hacer muchos esfuerzos para restaurar todo lo que se perdió en el contexto de esos acontecimientos que provocaron un número considerable de muertos, heridos e importantes daños materiales.
“Espero que, como en años anteriores, utilicemos el potencial de interacción entre Rusia y Kazajastán, principalmente, por supuesto, en el aspecto económico”, indicó el mandatario.
Destacó que Moscú es el mayor socio comercial y económico de Nursultan y que el año pasado el comercio bilateral aumentó en más del 34 por ciento, equivalente a 26 mil 500 millones de dólares.
Putin resaltó, además, que ambos Estados cooperan de manera activa en plataformas internacionales y que en el otoño de este año celebrarán el aniversario 30 del establecimiento de relaciones diplomáticas, por lo que se prevén una serie de eventos importantes.
Tokáyev, por su parte, manifestó que Rusia y Kazajastán lograrán los resultados deseados en su cooperación estratégica.
Apuntó que ambos países “son vecinos ideales, tienen la frontera terrestre más larga del mundo y solo hay amistad y cooperación en las relaciones”.
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