Zebari es uno de los aspirantes al cargo que emergerá de una votación en el Parlamento, aplazada en un primer intento por falta de quórum.
La instancia judicial consideró que incumple con los requisitos, tras salir a la luz una acusación por corrupto durante su gestión como ministro de Finanzas.
Sin embargo, el Partido Democrático del Kurdistán insiste en la nominación de Zebari.
Desde el pasado día 7, la elección presidencial iraquí entró en una pausa indefinida que de paso retrasa la formación del Gobierno.
Por Constitución, la jefatura de Estado en el país mesopotámico la ocupa un kurdo, la de Gobierno un musulmán chiita, y la del Parlamento un musulmán sunita.
jf/arc