Una de las joyas de la cultura de una de las primeras urbes fundadas en Cuba, en febrero de 1514, “ve cumplirse un viejo anhelo, y se lo debemos en gran medida a los estudios y colaboraciones con especialistas del Cementerio de Santa Ifigenia, en Santiago de Cuba”, dijo en la apertura del local, José Rodríguez, director de la Oficina del Historiador de la Ciudad de Camagüey.
Antiguo necrocomio que data de inicios del siglo XX, había sufrido deterioro tras más de dos décadas sin funcionar.
“Así que decidimos retomar estos valores de la arquitectura de estilo neoclásico, y que aún tenía su estructura exterior bien conservada, y el mármol de Carrara del interior”, dijo a Prensa Latina, Henry Mazorra, arquitecto y protagonista del proyecto de remodelación.
La pérdida de varios de los atributos llevó al grupo de especialistas a retomar información valiosa que ayuda hoy al visitante a comprender el transcurso y evolución del local, considerado uno de los más importantes baluartes del patrimonio funerario en Cuba, objeto de visita del turismo internacional que llega al Centro Histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad.
“El local tiene un diseño de interiores donde prima el color negro que trata de transmitir carácter de solemnidad, en tanto a nivel de contraste se va distribuyendo la iluminación, y se jerarquiza hasta el el final para proporcionar más información, y sensibilizar a las personas sobre la evolución del cementerio y las personalidades que acá descansan”, refirió Mazorra.
Entre los presentes a la inauguración del Centro de Interpretación, estuvo el Héroe de la República de Cuba Antonio Guerrero, quien se interesó por los distinguidos que reposan en el campo santo, inaugurado el 3 de mayo de la época neo-colonial, y en el que descansan figuras como Salvador Cisneros Betancourt (1828-1914), Presidente de la República en Armas, y la primera esposa de José Martí, Carmen Zayas Bazán (1853-1928).
La preservación de los valores más allá de lo arquitectónico y urbanístico, resulta premisa de la Oficina del Historiador de la Ciudad, y la dirección de Patrimonio en esta urbe, que tiene además diversos proyectos en el Cementerio, entre ellos los estudios por llegar a los restos de Ignacio Agramonte (1841-1873) y Joaquín de Agüero (1816-1851), dos de las figuras emblemáticas en las luchas libertadoras del siglo XIX.
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