Operación militar pretende prevenir una guerra global, afirma Rusia
El portavoz del ente militar, general de división Ígor Konashénkov, explicó que más de 200 helicópteros rusos aterrizaron con éxito en el lugar y que durante los enfrentamientos se registraron 200 bajas entre las tropas enemigas.
Señaló que las unidades rusas bloquearon las vías hacia la capital ucraniana desde el oeste y desmintió que las fuerzas estén bombardeando la capital de ese país.
A la vez, Konashénkov llamó a la población ucraniana a evitar ser utilizada como escudo humano por las autoridades de esa nación.
El alcalde de Kiev, Vitali Klichko, indicó en su cuenta de la plataforma Telegram que la ciudad está iniciando su defensa y señaló que las autoridades locales convocaron a los residentes a permanecer en casas o refugios.
A la vez, les recomendó que se abastezcan de agua, alimentos y otras vituallas.
Antes, Konashénkov informó que las fuerzas rusas deshabilitaron 118 instalaciones militares en Ucrania como parte de la operación armada iniciada la víspera.
Según explicó, en la lista aparecen 11 aeródromos, 13 puestos de mando y centros de comunicación, 14 sistemas de misiles antiaéreos y 36 sistemas de radar.
También reportó que fueron derribados cinco aviones de combate, un helicóptero, cinco drones, 18 tanques y otros vehículos blindados de combate, siete sistemas de lanzacohetes múltiples, 41 unidades de vehículos militares especiales y cinco embarcaciones de guerra.
Konashénkov significó que más de 150 militares de diversas unidades de Ucrania depusieron las armas y se rindieron durante combates en Donbass.
Rusia lanzó este jueves en la madrugada una operación militar en la región autónoma ucraniana de Donbass, luego que las autoridades de las autoproclamadas Repúblicas Populares de Donetsk (RPD) y Lugansk (RPL) solicitaran ayuda para repeler la agresión de Kiev.
El pasado 21 de febrero, Moscú reconoció la independencia y soberanía de ambos territorios y firmó tratados de amistad, cooperación y asistencia mutua con sus líderes, los cuales incluyeron el establecimiento de relaciones diplomáticas y la ayuda militar.
La información sobre el inicio del ataque fue informada por el presidente Vladimir Putin en un discurso televisado, en el que afirmó que Rusia tratará de proteger a la población del Donbass y desmilitarizar Ucrania.
El mandatario instó a los militares ucranianos a deponer las armas y advirtió sobre la posibilidad de una respuesta inmediata en caso de intentos de intervención externa en la situación.
Las Fuerzas Armadas rusas lanzaron los ataques contra infraestructuras militares, instalaciones de defensa aérea, aeródromos y la aviación militares con armamento de alta precisión.
El Ministerio subrayó que la población civil de Ucrania no está amenazada.
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